lunes, 24 de noviembre de 2008

11 - Un auténtico vienés en Valdivia





En el capítulo de esta semana de "Memoria Musical de Valdivia" una vez más nos detendremos a profundizar en un personaje notable para la historia de la cultura de la ciudad.

En 1925 llegaría a Valdivia Roberto Mahler, un compositor y director austríaco que llegaría a ser uno de los pilares de la música local. A sus 43 años este sobrino del célebre Gustav Mahler, si bien no contaba con la fama de su tío, nno era un desconocido en la exigente escena europea y ya contaba con varias obras publicadas y había estrenado hacía poco varias operetas en el corazón del imperio Austrohúngaro. En “Wiener Volkssänger”, sin ir más lejos, había trabajado en conjunto con Victor Leon, el afamado libretista de La Viuda Alegre de Franz Léhar y "Sangre Vienesa" de Johann Strauss.

Así, quien llegaba a estas tierras tan lejanas era sin duda uno de los músicos profesionales con la trayectoria más importante que hubiese visto Valdivia. En un cimienzo, sin embargo, la labor de Mahler distó bastante de componer y se concentró en fortalecer algunos de los conjuntos musicales que ya existían en la ciudad, como la banda del Rigimiento Caupolicán y el coro Männergesangsverein, así como actualizar y dar mayor variedad a sus repertorios.

Tras decidir radiacarse definitivamente en Valdivia en 1928, Mahler se convirtió en un eje indispensable para la vida cultural valdiviana. Su academia contaba con numerosos estudiantes de violín y todas las semanas se reunía con un grupo de músicos aficionados amigos.

Fueron justamente estas reuniones informales las que dieron vida al que probablemente haya sido el más emblemático de los aportes de Roberto a la memoria musical de la ciudad: la Orquesta Mahler. Compuesta íntegramente por músicos amateur a exepción del propio Mahler, esta agrupación se convirtió en el alma de la vida social de Valdivia hasta su desaparición en 1943. A lo largo de su historia la orquesta se distinguió por difundir las últimas novedades musicales como el swing o los ritmos que sonaban en los salones y hoteles berlineses de los "Locos Años 20".

Mahler, sin embargo, hubo de enfrentar más de alguna adversidad en su vida. Así, por ejemplo, su carrera se vió dificultada durante el apogeo del nazismo debido a su origen judío. Pese a ello, y acompañado de amigos como Heriberto Appelius, logró estar por emcima de dichos obstáculos. Con el tiempo, en sus últimos años y apoyado por sus discípulos Donald Little y Omar Grenci, Mahler decidió aventurarse en su otra pasión: la música coral. En éste ámbito fue él quien por primera vez sacó a los coros de su letargo y los organizó para dejar de ser clubes sociales y convertirlos en auténticos conjuntos artísticos.

Como lamentablemente suele suceder con estos grandes personajes, Roberto Mahler murió en la pobreza y muy pocos reconocen hasta el día de hoy el valor de su legado.

Para conocer más de cerca la figura y el legado del maestro austríaco contamos en "Un auténtico vienés en Valdivia" con la colaboración del Profesor Leonardo Mancini, quien fuera estudiante de Roberto y posteriormente miembro de la célebre Orquesta Mahler.

Ejemplos musicales de "Un auténtico vienés en Valdivia":

1- "Un Cuento Olvidado"
2- Vals "Viena Antigua"
3- "Preludio"
4- Extracto de "Vals Lente"
5- "Para Ti"

No hay comentarios.: